Los autonomos deben realizar, de manera obligatoria, la declaración de la renta, la cual comenzó en el mes de abril y cuyo plazo de presentación se extiende durante todo el segundo trimestre. Es hora de rendir cuentas con el fisco, por lo que es importante tener en cuenta diferentes datos para cumplimentar el modelo de manera correcta. En esta entrada te aportamos más detalles para que no tengas problemas.
Los datos que debes tener en cuenta
La diferencia entre una declaración mal presentada y otra hecha correctamente es abismal: cuando hay errores, Hacienda puede llamar a tu puerta para que modifiques datos y, en el peor de los casos, exigirte una inspección que puede acabar en un procedimiento sancionador. Pero los problemas no se quedan ahí: al añadir mal los datos u omitirlos, el trabajador por cuenta propia puede estar perdiendo dinero que, realmente, es suyo (el fisco puede devolverte cantidades que no esperabas). Por lo tanto, un modelo 100 bien hecho es sinónimo de tranquilidad y de haber cumplido los deberes. De ahí, la importancia de presentar bien la declaración con los datos que te comentamos a continuación.
1. Datos insertados de manera pormenorizada
Un error que cometen muchos trabajadores por cuenta propia al hacer la declaración de la renta es trasladar todos los datos sin realizar comprobaciones. Hacienda te pide que no hagas esto y que introduzcas, de manera ordenada y por trimestres, todos los rendimientos por tu actividad. Esto es lógico: la AEAT cruzará todos los datos y, si ve que descuadran mucho o no coinciden, te exigirá modificaciones o abrirá una inspección para saber qué está ocurriendo.
2. Las deducciones por tu actividad
Son las deducciones que Hacienda mira con lupa. Aunque ya has hecho deducciones en los modelos trimestrales, los mismos gastos deducibles puedes añadirlos al modelo 100. Eso sí, deben ser gastos relacionados con tu actividad profesional, los cuales deben ser justificados con extractos bancarios o facturas. Los sueldos, la maquinaria, los consumibles o suministros, entre otros, serían los que puedes deducir.
3. La deducción de la cuota de la Seguridad Social
La declaración de la renta para autónomos tiene otra deducción, quizá la más importante, que es la de la cuota a la Seguridad Social. Son muchos los trabajadores por cuenta propia que la aplican en la casilla 185, independientemente de si has pagado la tarifa plana durante los primeros meses (60 euros) o una cuota superior (de los 290 euros para adelante).
4. Deducciones de cada autonomía
Estas deducciones no se trasladan al borrador de manera automática. Por eso, debes prestar atención a todas ellas, como el resto de trabajadores. Los importes deducibles están desde la casilla 850 en adelante y son una buena forma de aminorar los rendimientos totales que pueden provocar un «vuelco» en la declaración: de tener que pagar, a que te devuelvan capital.
5. Apartados dependiendo de la estimación
Si se hace una actividad en estimación directa, sin importar que sea normal o simplificada, el apartado a rellenar será el D1 (en la página 8). Para los que operen en estimación de módulos (objetiva), rellenarán el apartado D2 de la página 9, en el caso de que su actividad no sea ganadera o forestal. En el caso de que sí sea, el apartado será el D3 (página 10).
Estos son los principales datos que deben tener en cuenta los trabajadores por cuenta propia que hagan la declaración de la renta por su cuenta. Considerar todo lo que te comentamos te evitará problemas con Hacienda (inspecciones o requerimientos de modificación) y, además, incrementará la posibilidad de que el resultado sea favorable para tus intereses.